El Secreto De Lalla Salma, La Mujer Del Rey De Marruecos, Mohamed Vi Lifestyle

Varias mujeres de viviendas reales árabes se han intentado en poner en contacto con ella sin éxito. Lalla Khadija con su familia en la visita que los Reyes de España hicieron a Marruecos. La princesa es una muchacha muy aplicada, y toca tanto el piano como la guitarra. La separación, aún no confirmada de manera oficial, se consideró consumada poco después, cuando una web hasta el momento ignota, Le Crapouillot Marocain, criticaba con una dureza inusitada a la que aún se consideraba Hija del Pueblo. Destacaba su \’\’falsa actitud cool\’\’ y le atribuía un carácter colérico, agresivo y narcisista fruto de un \’\’ego desmedido\’\’.

Moulay Hassan, el heredero (15 años), y la princesa Khadija , los dos en este momento muy presentes en los medios locales, completaron el cuadro de una familia feliz. Sin embargo, siempre se ha especulado sobre la relación distante de la pareja. “Pero el problema es más que nada la sepa de un gobierno legítimo capaz de interactuar con los ciudadanos. El debilitamiento de la sociedad civil y la represión de los medios de comunicación y de los cronistas privan a Marruecos de canales de contrapoder y de mediación. Por tanto, el palacio se encuentra mucho más que nunca sin ‘parachoques’ en frente de las demandas y expectativas crecientes de la población”, subraya el reportero, una de las víctimas del espionaje masivo llevado a cabo por los servicios misterios marroquíes a través de Pegasus. A su juicio, ese vacío político -surgido de unas pseudo elecciones festejadas el año pasado donde hubo un extendido empleo de la compra de votos- está simbolizado en el ascenso del presidente Aziz Akhanouch.

la reina de marruecos

Ambas se sentaron en un puesto de pinchitos de la plaza y degustaron caracoles, según ciertos otros clientes del lugar. Esas imágenes de madre e hija gozando de un plan familia fueron las primeras que tuvimos de Lalla Salma tras su divorcio un año antes, acallando de esta forma los comentarios que habían surgido sobre su paradero. También se vió a Lalla Salma con sus hijos en Novedosa York y en Grecia. Ciertas fuentes diplomáticas apuntan que se negocia un acuerdo con ella para que guarde un escrupuloso silencio sobre su vida conyugal en lugar de una suntuosa existencia en el extranjero y el permiso para seguir en contacto con sus hijos, aunque bajo supervisión del entorno real. En verdad, filtraciones desde el entorno real aseguran que los cuatro hermanos del rey siempre y en todo momento juzgaron con desagrado los aires liberales de su cuñada y que en ello podría estar el origen de su caída en desgracia.

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No obstante, con la llegada del coronavirus este plan de lanzar la imagen de Khadija quedó apartado a un segundo plano, y son ya dos años los que han pasado sin una fotografía de la princesa. En palacio hace ya tiempo que se murmura sobre la abdicación de Mohamed VI por fundamentos de salud. Sus populares inconvenientes cardiacos podrían ser los síntomas de una patología autoinmune llamada sarcoidosis, que afecta a los riñones, los pulmones, los ojos y el corazón, según las infiltraciones que llegan desde círculos médicos franceses. Quizá aguardaría hasta la mayoría de edad de su hijo para cederle el trono, liberándose de la carga de la corona para disfrutar ya solo de sus amigos. En el mes de septiembre de 2011, asistió a su primer día de clase en el colegio real situado intramuros del Palacio Real de Rabat.

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El libro \’Memorias de un soldado marroquí\’, escrito por Abdelilá Issou, un exoficial del Ejército que vive exiliado en España, provocó hace cinco años un enorme encontronazo al descubrir escandalosas interioridades de la monarquía de su país. \’\’Un día, un joven subteniente cuya madre trabajaba en palacio y cuyo tío era un prominente mando de la Guarda Real, me hizo unas confidencias sorprendentes. La difusión reciente de unas imágenes en las que aparecía caminando con contrariedad por París en plena noche fue la última prueba de su ausencia. Fuentes con extensa información afirman que el monarca, con 59 años recién cumplidos, “volvió a las andadas”. Padecería sarcoidosis, una patología que hace inflamación, por lo general en sus pulmones, piel y ganglios linfáticos, o la patología de Hashimoto, un trastorno autoinmunitario que afecta a la glándula tiroides. Allí radica con su hija, la princesa Khadija, de 11 años, y algunos fines de semana se les une el príncipe heredero Moulay Hassan, de 15 años, según cuenta el periodista Ignacio Cembrero en Vanitatis.

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La llegada al mundo de Lalla Khadija fue un instante de júbilo y festejo para el pueblo marroquí. A lo largo de días hubo manifestaciones de alegría en las calles, incluso una firma de Libros de Invitados en la sede del Ministerio de la Casa Real, Protocolo y Cancillería, tal como en las distintas wilayas, prefecturas y provincias del Reino. Doña Sofía , única gerente de Casa Real en el funeral de Benedicto XVI en RomaLa reina emérita se sentó en un banco en primera fila en la Basílica de San Pedro y a su lado estaban los reyes Felipe y Matilde de Bélgica.

La esposa del rey de Marruecos, Mohamed VI, llevaba más de un año desaparecida de la vida pública, desde diciembre de 2017. Y la visita de Estado de los monarcas españoles al país alauita el mes pasado de febrero, en la que tampoco se la vio, oficializó esta ausencia. Mohamed VI aguardó a los Reyes de España, Felipe VI y Letizia, a los pies de la escalerilla del avión que los llevó a Marruecos el mes pasado de febrero. Lo acompañaban en el recibimiento sus 2 hijos y sus cuatro hermanos , todos intentando ocupar el vacío de la princesa ausente. Ya son 14 meses sin comprender nada de Salma, la todavía esposa del soberano alauí, quien semeja expiar con el olvido una falta aún ignota. La mayor parte de los medios marroquíes han evitado las explicaciones y algunos otros se han lanzado a una campaña para destruir su imagen que empezó en febrero de 2018, cuando el monarca reposaba en un hospital parisino de una intervención quirúrgica.

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Khadija transporta una vida de lo más prudente que se enfoca sobre todo en el interior del palacio real de Rabat, donde habita y recibe clases. Aunque desde el divorcio de sus padres, en 2018, explota asimismo los días que pasa con su madre para hacer ocupaciones más de a pie. Un año tras conocerse la separación real, Lalla Salma, que estuvo en sitio desconocido para muchos durante meses, reaparecía al lado de su hija, Lalla Khadija, en una de las plazas mucho más reconocidas de todo el mundo, Yamma el Fna, de Marrakech.

Tres periodistas de renombre se encuentran en la actualidad en prisión y el primordial rotativo en árabe del país ha desaparecido tras una campaña de ahogamiento financiero. Una vasta retahíla de retos ensombrece el futuro del país magrebí. “Marruecos ha demostrado a lo largo de décadas su capacidad de estabilidad política a costa de un gobierno fuerte. Sin embargo, esta situación paraliza e inhibe tres esenciales reformas que podrían asistir al país a superar mucho más de forma rápida para asegurar su estabilidad de una vez por todas”, estima Vermeren. “Multimillonario y amigo del rey, el primer ministro goza de una popularidad bajísima debido a su implicación en escándalos financieros relacionados con flagrantes enfrentamientos de intereses en los que está involucrado y asimismo por su escaso carisma en términos de comunicación. En todos y cada crisis prefiere mantenerse en la sombra y esconderse tras el rey en lugar de ofrecer explicaciones a los ciudadanos”, denuncia el periodista.

En 2018, un periodista marroquí aseguró haber coincidido con la princesa en una excursión a Portofino , pero no existió ningún documento gráfico que demostrase su versión. Hicham Bouchti, quien fue secretario en el Estado Mayor de las Fuerzas Socorrieres y hombre de seguridad de sus superiores, publicó asimismo la experiencia de su contacto con los círculos de la élite marroquí. En La hospitalidad de el intelecto, otro libro escrito desde el exilio, Bouchti enseña que por sus manos pasó un archivo reservado donde se comunicaba de que Latifa había sido confinada bajo vigilancia en la vivienda real de Sjirat. De esa forma Mohamed VI la castigaba por seguir manteniendo una relación sentimental con el exguardaespaldas de su padre. Una vez concluida la pena, se dispuso su destierro oficialmente voluntario a París, donde radica en la más absoluta discreción, hasta el punto de que en Marruecos está contraindicado difundir sus fotografías.

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En los últimos años, el monarca ha sustituido a su familia por una nueva, formada por los Zaiter. La prolongada ausencia del rey ha agravado los problemas de un país que desde la década de 1960 ha sido un espacio de emigración. Su población, por encima de los 37 millones, tiene una diáspora que sobrepasa los cinco millones. Mohamed VI continúa fuera del país desde primavera, principalmente en París, donde estuvo recibiendo asistencia médica y disfrutando de unas vacaciones casi perpetuas. “A las ausencias regulares del rey se aúna el vacío político en un sistema ejecutivo, haciendo que las tensiones sociales sean aún mucho más fuertes”, reconoce a este períodico Hicham Mansouri, un periodista marroquí exiliado en Francia.

En Marruecos ningún medio se hubiera atrevido a difundir ese alegato sin la aprobación del rey. El rey Mohamed VI y la princesa Lalla Salma al lado del heredero Moulay Hassan y la pequeña Lalla Khadija, que soplaba las velas de su cuarto cumpleaños. La normalización con Tel Aviv, fechada en el último mes del año de 2020, es otro de los componentes que alimentan la desestabilización interna. “A pesar de su modernismo, es un país que continua apegado a los valores del islam y a la pelea de los palestinos. La normalización con Israel no semeja haber traído ni la resolución determinante de la cuestión del Sahara ni la prosperidad económica prometida”, resalta Mansouri.