Santa María Del Mar Barrio De La Ribera Vecindario Medieval

La mortandad fue tan alta que hubieron de abrirse fosas comunes –como la descubierta en la iglesia de los santurrones Justo y Pastor–, ya que se saturaron los cementerios. Santa María del Mar cobró un protagonismo absoluto cuando se transformó en destino de la enorme procesión que, desde la catedral, organizaron las autoridades eclesiásticas con el fin de soliciar a la Providencia el antídoto que la ciencia parecía denegar a una localidad ahora dezmada por la peste. Solo en el momento en que el riesgo se dio por conjurado se reanudaron las proyectos, hasta darla por terminada en 1389, si bien fue consagrada antes por el obispo de Barcelona, el 15 de agosto de 1384. La construcción comenzó por el ábside, prosiguió por la girola y concluyó con la bóveda que cerraba el presbiterio.

Sin embargo, solo en 2013 la basílica recobró su total esplendor, al concluirse la compleja tarea de embellecimiento y acondicionamiento tanto del interior como del exterior, iniciada en 2006. Experimenta una visión única, una vez que las puertas de la basílica se cierren al público generalmente. Lograras bajar a la cripta del templo, pasear por sus tribunasy, como broche final, subir a su terraza, lugar desde el que lograras fascinarte con las maravillosas vistas de la ciudad de Barcelona al anochecer. A pesar de los accidentes debidos a un incendio , terremoto , de los bombardeos de las guerras aun quedan ciertas vidrieras originales con fecha desde el siglo XV al XVIII. Aquellas mucho más a bajo muestran muchos de los personajes que hacen parte de la narración de Barcelona.

Algo que te deja boquiabierto, impresionando de que en el corazón de la región, probablemente halla una maravilla histórica tan bella. El interior del edificio está estructurado en tres naves de altura afín en las que hay varias capillas, pero una ausencia prácticamente total de obstáculos visuales, 2 peculiaridades del gótico catalán. Ocho columnas acotan el altar mayor y lo separan de la girola, que sigue por detrás.

Información De Interés

El campanario es octogonal y las puertas son de roble macizo con decoraciones de hierro. Los vecinos de Vilanova del Mar consideraban la Catedral de Barcelona como un templo que les era ajeno, perteneciente a las élites nobiliarias, fundamento por el que nació entre los habitantes el deseo de tener un templo propio del distrito. Las autoridades eclesiásticas aprobaron el proyecto y las grandes familias del barrio apoyaron a nivel económico su construcción. Y, para finalizar, fueron los propios vecinos, adjuntado con los armadores, mercaderes y trabajadores quienes ejercieron como mano de obra en la construcción de la basílica.

El 1 de agosto, la pareja real logró su entrada solemne en Barcelona y se dirigió de manera directa a Santa María del Mar, donde se festejó el oficio espiritual. Tampoco el poder administrativo, concentrado donde antaño se encontraba el foro romano, fue ajeno al nuevo estilo. Así, la presente plaza de Sant Jaume vio erigirse el palacio de la Generalitat y la vivienda de la Bailía General.

La Crónica De La Catedral Del Mar De Barcelona

Por esto aconsejamos un guía para una visita dirigida de esta magnífica localidad. Fue ya en el siglo XIII en el momento en que Vilanova del Mar (o lo que después comenzó a nombrarse el barrio de la Ribera) protagonizó un importante desarrollo; apogeo que animó a los vecinos a fomentar la construcción de una basílica de mayores dimensiones. En cierta forma, los moradores del barrio de la Ribera deseaban tener una “catedral” que sintieran como propia, pues entendían que la genuina catedral de Barcelona no era más que un templo designado a las élites de la región, y no a la feligresía de caminando. El origen de este muy elegante templo se remonta a la temporada en que Barcelona era una colonia romana. Así pues, este cementerio ha podido ser el sitio donde se creó la capilla de Santa María de las Arenas, una pequeña construcción que se fue ampliando poco a poco, y que, según refleja la documentación, en el siglo VII ahora era conocida como la parroquia de Santa María del Mar. En el exterior tenemos la posibilidad de observar las características del gótico catalán, como las líneas rectas y los contrafuertes macizos, sin arbotantes, que le dan un aspecto robusto, sólido, muy distinta de las catedrales góticas europeas.

Estas previamente habían sido retiradas de la cantera real, ubicada en la montaña de Montjuic, y traídas en barca hasta las inmediaciones del templo. Con este claro propósito, los pobladores del barrio se volcaron en la construcción de la catedral de Santa María del Mar, consiguiendo erigirla en solo 55 años. Solo flanquear la puerta de entrada el visitante puede sentir la ligereza del edificio producida por la gran altura de la nave central, con imponentes columnas octogonales y bastante espacio entre cada una, y coronada por el gran rosetón policromo. De des perfectas, sobria, elegante y elevada, la basílica de Santa Maria del Mar de Barcelona es el más destacable exponente del gótico catalán. Dice la leyenda que tiene dentro tantas piedras como días se tardó en levantarla, piedras que fueron cargadas y transportadas por los ganapanes desde la montaña de Montjuïc hasta el arenal del vecindario de la Ribera para crear su catedral. La testera primordial da a la Plaza de Santa María del vecindario de La Ribera, al tiempo que en el costado este se halla el Fossar de les Moreres, un memorial a las víctimas del asedio de Barcelona de 1714.

Muchas de las vidrieras de Santa Maria del Mar cedieron al incendio de 1936, pero otras, como la del Jucio Final o la de Pentecostés y la Santa Cena han sobrevivido hasta la actualidad. Entre las más destacados es el rosetón de la fachada principal, que se desmoronó con el terremoto de 1428 y se recobró en 1460. De la iglesia podemos destacar la vidriera de la Ascensión, en la Capilla de Santa María, y la del Lavabo en la de San Rafael, así como el gran rosetón.

barcelona santa maria del mar

Éste fue destruido durante el terremoto que logró temblar Barcelona en 1428, y restaurado a mitad del siglo XV. Si nos fijamos en el suelo, encontraremos sepulcros particulares y asimismo sepulcros de cofradías y gremios de la Edad Media en Barcelona. Y es que esta Basílica de Santa Maria del Mar, obra apuntada por Berenguer de Montagut, fue el templo de los armadores y mercaderes de la Barcelona gótica. Además, el recorrido guiado acabará tras recorrer todos los recovecos de Santa María del Mar con las maravillosas vistas de la región catalana desde las terrazas. La ruta literaria La Catedral del Mar te brinda la oportunidad de descubrir la Barcelona que Ildefonso Falcones describió en su novela.

Es esencial escribir ciertas especificaciones arquitectónicas de Santa María del Mar para entender el porque es tan especial. Al ingresar las tres naves parecen estar a la misma altura, pero no es de esta forma, es efecto óptico debido a las distancias de las columnas entre ellas y a la bóveda y a la altura de las naves. Es mucho más, el templo fue escenario del tede um que celebró sus esponsales con Isabel Cristina de Brunswick. La boda se había celebrado en Viena por poderes a comienzos del verano de 1708. En julio del mismo año, Isabel Cristina llegó a la costa catalana y desembarcó en Mataró, donde fue recibida por su marido.

Los Vitrales Superiores De La Basílica

Los amantes de la arquitectura no deberían dejar la Ciudad Condal sin pisar esta increíble basílica. Las entradas se adquieren en el Punto de Información al Visitante de la Basílica . Gratuito para inferiores de 10 años acompañados de un adulto, y para personas con un nivel de discapacidad superior al 65%. El año 1923 recibió el título de basílica menor, concedido por el papa Pío XI. Esta catedral pertence a los monumentos arquitectonicos mas hermosos de Barcelona. Quiero este rincón a la Sagrada Familia, por suerte no es tan conocida y no hay tanto turista como en la otra.

Los trabajos solo se interrumpieron en 1348, cuando Barcelona padeció entre los momentos mucho más tristes de su crónica, que tuvo su epicentro en Vilanova del Mar. A fines de abril atracó en el puerto un barco que viene de Génova, y con él el azote de la peste negra . La mayoría de su tripulación ya estaba enferma y no tardó en contagiar a los estibadores, quienes, a su vez, llevaron la pandemia al resto de barceloneses. La propuesta no solo halló eco en las autoridades eclesiásticas, que de inmediato apoyaron la iniciativa, sino más bien asimismo en las grandes familias de la zona, que no vacilaron en asumir la financiación. Pedro III de Aragón, por su lado, concedió el permiso preciso para derribar distintas edificaciones del entorno y reaprovechar sus componentes en la basílica. Discurría por las actuales Ramblas y proseguía por la ronda de San Pedro y el paseo de Lluís Companys hasta alcanzar el monasterio de Santa Clara, donde el día de hoy se levanta el parque de la Ciudadela.