Eso sí, no se debe tener ni vértigo ni marearse, tanto la subida como la bajada son tortuosas. Desde aquí se vieron zarpar los cientos y cientos de barcos que históricamente llevaron a los penados franceses a los terribles destinos penitenciarios de la Guayana y Nueva Caledonia. Los burros de pelaje largo y enmarañado que se ven por toda la isla de Ré son de una raza autóctona que, antes de la mecanización, se utilizaban para trabajar en las salinas. A fin de que moscas y mosquitos no les torturaran las piernas, se les ponían unos culottes de protección.
Bajo las órdenes de Charles de Gaulle, el almirante Émile Muselier organizó la “liberación” de San Pedro y Miquelón, sin el consentimiento o conocimiento de las autoridades estadounidense o Canadá. El 24 de diciembre de 1941 una flotilla de la Francia Libre dirigida por el submarino Surcouf tomó control de las islas sin resistencia. De Gaulle organizó un referéndum, que le fue favorable, y las islas se transformaron de esta forma en el primer territorio en sumarse a la Francia Libre. Entre 1763 y 1778, las islas se convirtieron en cobijo de los acadianos deportados de Novedosa Escocia, en Canadá. En 1778 las islas fueron atacadas y la población deportada por los ingleses debido al acompañamiento de Francia hacia las Trece excolonias británicas durante su lucha por la independencia de los Estados Unidos. Hay patentizas de que las islas estaban habitadas en época prehistórica, aunque los primeros asentamientos europeos fueron franceses y datan del siglo XVI.
Archipiélago De Las Glénan
Su nombre se traduce como “hermosa isla en el mar”, lo que resulta muy correspondiente dada su increíble ubicación natural en la bahía de Quiberon, en la costa suroeste de Bretaña. Todas y cada una de las islas francesas de más de 100 km 2 , clasificadas por área decreciente. Hoy tenemos en consideración a entre los países vecinos de España para escoger ciertos de esos sitios idílicos sin necesidad de salir de Europa. Estas son las seis islas francesas paradisiacas que te planteamos a fin de que poseas en cuenta en futuras fugadas. De esta manera, San Pedro y Miquelón es actualmente una red social de estado único, sui géneris, definida por el artículo 74 de la Constitución de Francia.
La política local está estructurada cerca de un sistema democrático parlamentario dentro de la colectividad de ultramar de Francia. Las islas asimismo envían un diputado a la Reunión Nacional de Francia y un senador. Las islas fueron declaradas territorio de ultramar en 1945 y departamento de ultramar en 1976. Este estatus fue cambiado el 11 de junio de 1985 y las islas se convirtieron en una colectividad territorial, un estatus especial que solo comparte con las islas de Wallis y Futuna en el océano Pacífico. En la revisión de la Constitución del 28 de marzo de 2003 se creó la categoría genérica de la colectividad de ultramar, en la que se englobaría a San Pedro y Miquelón.
Por Población [ Editar ]
Se trata del único territorio francés en América del Norte, un resto de lo que fue el Virreinato de Nueva Francia y que incluyó la región francófona de Canadá o la Luisiana. Desde 1985 es una colectividad territorial francesa con un estatuto particular. Tiene el número 975 en la numeración de los departamentos de Francia y su código postal es el para todo el archipiélago. Además, forma parte de los Territorios destacables de la Unión Europea , como lo son las Islas Canarias españolas, Azores y Madeira portuguesas, o Guadalupe, Martinica o Asamblea, francesas, además de las mentadas de Saint Pierre et Miquelon. La Rochelle está resguardada en una bahía del océano Atlántico y es un impresionante puerto marítimo que data de la Edad Media.
Pero muchos no lo hacen disuadidos por la tarifa, sino más bien conscientes de que el relieve absolutamente llano de la isla y la espesa red de carriles-bicicleta (mucho más de 110 kilómetros) les proporcionará una estancia mucho más placentera. El cuarto día espera el emblemático Mont St-Michel, inmejorable si se accede descalzo por la arena. La semana acaba en Bretaña, en una caseta de playa a la antigua en Dinard y de paseo por los espectaculares cabos próximos a Camaret-sur-Mer. El corazón de la ciudad es el ayuntamiento “Hôtel-de-Ville”, un edificio renacentista suntuosamente adornado que está abierto al público. Pero también vale la pena conocer la Rue des Merciers, bordeada de arcadas, con sus numerosas y elegantes boutiques.
Saint-malo
El sitio es en este momento en parte un hotel, donde los viejos cuarteles se han convertido en habitaciones de mucho lujo. Sin embargo, también hay un museo que trata la historia de Belle-Île-en-Mer. Las atracciones culturales abundan, especialmente en el centro histórico de Nantes. El vecindario de Bouffay, siempre repleto de actividad, incluye varios sitios de visita obligatoria. Entre ellos se encuentran la Catedral de San Pedro y San Pablo, el castillo de los duques de Bretaña, el palacio de Bellas Artes y el Jardín de las Plantas. Fuera de los meses de julio y agosto, Ré recobra su adormecido ritmo, lo que hace aconsejable visitarla el resto del año.
Asimismo gozarás al límite explorando el casco viejo de La Rochelle. Es entretenido pasear por las inspiradoras calles peatonales y contemplar los majestuosos monumentos históricos de la ciudad. Para llegar a Belle-Île-en-Mer, hay que tomar un ferry en Quiberon, que funciona todo el año y te llevará a la isla en 5 minutos.
En lo que se refiere a su extensión, toda la costa atlántica francesa se alarga desde Hendaya, al sur y cerca de la frontera con España, hasta Brest, en Bretaña. Además, a lo largo de la ruta vas a encontrar numerosas ciudades grandes y pequeñas, como Nantes o La Rochelle. Esta histórica ciudad de la costa atlántica francesa se construyó en torno al río Charente en el siglo XVII y se encuentra situada a unos 35 kilómetros al sur de La Rochelle. Se tarda unos 40 minutos en llegar en coche y una hora aproximadamente en tren.
Islas Francesas De Ultramar [ Editar ]
El viejo puerto Vieux Port está custodiado por dos enormes torres, la Tour Saint-Nicolas y la Tour de la Chaîne, que se usaban con fines defensivos en la Edad Media. En el animado puerto también hallarás varios sitios de comidas y cafés donde lograras tranquilizarte. La principal localidad de Belle-Île-en-Mer es Le Palais, una interesante ciudad con varios restaurantes, hoteles y galerías de arte. Sobre el puerto de esta localidad está la Citadelle Vauban, una ciudadela medieval construida en el siglo XVII por el ingeniero militar francés Sébastien Le Prestre de Vauban.